Críticas

Lecciones sobre traumas y miedos

Beau tiene miedo

Beau is afraid. Ari Aster. EUA, 2023.

Beau tiene miedoSi se quisiera mostrar lo que son los traumas y cómo se combinan con las realidades de la vida, esta película es un ejemplo excelso. Si se quisiera resaltar cómo un actor se involucra a tope con un difícil e ingrato papel, asumiéndolo en cada momento con entera apropiación, el protagonismo de Joaquín Phoenix en esta cinta podría considerarse icónico. Si se quisieran destacar las extrañas situaciones de desorden, de hastío y de locura que invaden sectores enteros y grupos humanos de algunos de los países desarrollados, acá se pueden encontrar ejemplos alucinantes. Si se quisiera visionar una obra excesiva, dramática, abrumadora, que desconcierta y atrae, Beau tiene miedo sería una muy buena escogencia.  Con estas cuatro hipérboles quiero destacar mis impresiones de esta obra, que pienso que van a permanecer por un buen tiempo.

Me quiero referir al personaje central, Beau, un hombre solitario, que no ha logrado encontrar el equilibrio vital. Proviene de una familia adinerada, pero vive en condiciones, que, sin ser miserables, sí son deplorables, especialmente considerando que no tiene amigos, que no tiene un empleo claro, que no tiene planes ni proyectos de vida. El filme nos lo muestra sufriendo desastre tras desastre, arrastrado por agobiantes tormentas de humillación y de sufrimiento físico y moral; cada intento que hace, poniendo en ello una aparentemente buena intención, se convierte en una tragedia más. Aparecen accidentes, heridas, robos, desengaños e incomprensiones. Cada personaje que se acerca a su vida desgraciada, con ánimo compasivo o de apoyo, sufre también o resulta mareado por el extraño sino que persigue a Beau, de manera que se podría decir que todo lo que este personaje toca se convierte en ruinosa frustración. Vale la pena apreciar a Joaquín Phoenix, con su enorme capacidad para aportar una inútil medida de esperanza a sus dramas, que también nos hace a nosotros pensar que la redención para sus males está a la vuelta de la esquina de esta extensa saga. Beau no solamente tiene un miedo destructivo, una batería de traumas, un inconsciente potente e invasivo, sino también una extraña e inocente bondad que hace más dolorosa su deprimente historia.

Beau is Afraid

Quizás presenciando tanto dolor y tanto trauma personal, podemos elaborar los espectadores algún tipo de duelo que nos alivie de caer en tales tentaciones o abismos traumáticos, tomando alternativamente la decisión de fortalecer y alimentar el alma con proyectos de vida y con relaciones más humanas.

Es que el ambiente en muchas zonas de las ciudades se está desbordando a base de drogadicción, del deterioro del amoblamiento urbano, de la invasión por habitantes que no tienen viviendas, que viven en calles y parques, donde pululan las personas enfermas, afectadas por los vicios y por  males mentales o del alma, situaciones ante las cuales parecen estar en derrota la policía, los gobiernos y los sistemas de prevención y de control, que prefieren dar la espalda o escudarse en eslogans y buenas intenciones, pensando que es asunto de pobreza, de injusticia social, que se resuelve con dinero y con tolerancia social en todos los niveles, considerando quizás que todas estas manifestaciones se convierten en eventos de diversidad que hay que celebrar.  El asunto es que estos ambientes crean miedo, son perturbadores y Beau los experimenta en toda su cruda dureza e inexplicabilidad, llevándonos, quizás horrorizados, quizás pensando que son exageraciones, más comedia que drama, a preguntarnos sobre sus límites, sus causas y sus soluciones.

Beau tiene miedo, fotograma

Ahora me quiero detener en el tema: Es una historia surreal, una mezcla de metaversos, de vivencias y de recuerdos, alguna ensoñación también, una exploración por el mundo del subconsciente de casi todos los personajes, donde priman el absurdo, la exageración, lo que no se puede explicar. Y, sin embargo, el guion se involucra en razones, en preguntas y respuestas, y los distintos personajes se atreven a definir las escenas, las absurdas relaciones y sus consecuencias, generando aún más extrañeza. La locura domina con sus imposibles definiciones, donde todo cabe, donde abunda la relatividad de las contradicciones.

Al final estamos ante una obra excesiva y obsesiva, pero también admirable, por su expresividad, por sus rescoldos de humanismo, que surgen de las cenizas de esos fuegos que todo lo queman. La podemos tomar como una exploración, como una visita a los infiernos que se esconden en la reactividad y en la agresividad humana, reinos del miedo, de la culpa, del trauma y del dolor, del insulto y de la intolerancia, reforzados por recuerdos enfermizos, frustrantes y tristes. Podemos aprender de estas lecciones sobre los traumas y los miedos, para establecer contrastes con las vivencias del trabajo, de las buenas prácticas, de los valores, de la solidaridad, del hogar y de los proyectos y sueños de vida. Son estos últimos posibles cielos, llenos de oportunidades y realismo. Y como los traumas, también se pueden diseñar y construir.

Trailer

 

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Ficha técnica:

Beau tiene miedo (Beau is afraid),  EUA, 2023.

Dirección: Ari Aster
Duración: 178 minutos
Guion: Ari Aster
Producción: Ari Aster, Lars Knudsen
Fotografía: Pawel Pogorzelski
Música: Bobby Krlic
Reparto: Joaquin Phoenix, Patti LuPone, Nathan Lane, Amy Ryan, Stephen McKinley Henderson, Parker Posey

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