Críticas
El ojo que se vuelve testigo
Lee Miller
Lee. Ellen Kuras. Reino Unido, 2023.
En Lee, la directora Ellen Kuras —hasta ahora conocida por su trabajo como directora de fotografía— abandona por primera vez la cámara como instrumento técnico para convertirla en herramienta de relato. Y lo hace contando la vida de otra mujer marcada por el acto de mirar: Lee Miller, modelo, musa, fotógrafa, corresponsal de guerra. Pero Lee no es solo la historia de una mujer extraordinaria que atravesó el siglo XX: es también una reflexión sobre el lugar del cuerpo —y especialmente el cuerpo femenino— frente a la violencia, el deseo y la historia.
Interpretada con entrega total por Kate Winslet, Miller emerge como una figura contradictoria y perturbadora. No hay aquí una heroína plana ni una reivindicación acrítica: hay una mujer que supo habitar los márgenes de su tiempo, que osciló entre la exposición y el ocultamiento, entre el retrato y el testimonio. Winslet se encarna en ese gesto, en esa tensión permanente entre mostrarse y desaparecer: su Lee no es una biografía cronológica, sino una presencia fragmentada, recortada por la memoria y el trauma.
La estructura del film rehúye los moldes del biopic clásico. Lejos de seguir una progresión lineal, Kuras opta por una narrativa más porosa, hecha de saltos temporales, evocaciones, huecos. La película se abre desde un presente enmarcado por la memoria: una Lee envejecida, huraña, que intenta responder preguntas sobre su pasado sin delatarlo por completo. A partir de allí, el relato avanza con una lógica más emocional que narrativa, alternando entre el glamour del París surrealista, las marcas de una infancia silenciosamente devastada, y las imágenes de los campos de concentración liberados, donde el ojo de Miller captó aquello que no puede ni debe olvidarse.
En ese juego de tiempos, Lee encuentra una de sus claves más potentes: no se trata solo de contar lo que ocurrió, sino de sugerir cómo aquello que fue vivido permanece como huella. La temporalidad del film está quebrada, como la de quienes cargan con el peso de haber visto demasiado. Kuras logra que el pasado no funcione como explicación, sino como interferencia: algo que se filtra en el presente con la fuerza de lo que insiste, de lo que no puede reprimirse.
La fotografía, eje central en la vida de Miller, está bellamente trabajada por Pawel Edelman. Pero no se trata de belleza en el sentido estético clásico, sino de una visualidad inquietante: cada plano parece preguntarse desde dónde se mira, qué se muestra y qué se deja fuera del encuadre. En varias escenas, la cámara permanece fija mientras el cuerpo de Lee se desplaza con furia o con vacío. En otras, es el ojo de ella el que se interpone, capturando imágenes para la historia, pero también ocultando su propia herida.
La figura de la fotógrafa de guerra conlleva una paradoja: mientras captura la violencia, también la presencia de su cuerpo en el frente resulta una anomalía. En ese sentido, Lee reflexiona sobre el género como un campo de batalla más. La película insiste en mostrar a Miller no solo como testigo, sino también como alguien que fue mirada, deseada, moldeada por las fantasías ajenas, y que sin embargo logró reapropiarse de esa mirada. Convertirse en fotógrafa fue su forma de invertir la lógica: ya no ser imagen, sino producirla. Ya no ser objeto, sino ojo.
Pero no hay redención fácil. Lee no convierte la experiencia de Miller en una trayectoria ascendente. Por el contrario, es una película marcada por el desgarro: la incomodidad con su pasado como modelo, la huella del abuso, el desprecio con que muchos recibieron sus crónicas del horror. La famosa foto de Miller en la bañera de Hitler aparece como un nodo simbólico: cuerpo femenino, vulnerabilidad, poder, burla. La imagen condensa esa mezcla de ironía y trauma que atraviesa toda la obra.
Lee no es solo el retrato de una vida extraordinaria. Es también una reflexión sobre el acto de mirar cuando mirar duele. Una meditación sobre la memoria como campo minado, sobre el cuerpo como archivo. Y, sobre todo, un homenaje a quienes, en medio del desastre, se atrevieron a documentar lo insoportable.
Ficha técnica:
Lee Miller (Lee), Reino Unido, 2023.Dirección: Ellen Kuras
Duración: 116 minutos
Guion: Liz Hannah, John Collee, Marion Hume. Biografía: Antony Penrose
Producción: Coproducción Reino Unido-Estados Unidos-Australia; Brouhaha Entertainment, Juggle Productions,
Fotografía: Pawel Edelman
Música: Alexandre Desplat
Reparto: Kate Winslet, Josh O'Connor, Andrea Riseborough, Andy Samberg, Alexander Skarsgard, Marion Cotillard