Psicoanálisis y cine

Por Isabel González


Teorías del cineDe acuerdo con la revisión que realiza Francesco Casetti en su Teorías del cine (1990), la relación entre psicoanálisis y cine comienza desde los años de la posguerra con la filmología1. En principio, con el análisis de películas a partir de algunas herramientas y conceptos psicoanalíticos, cuya tendencia era la de comparar los filmes con los sueños.

Pero será en los setenta cuando el psicoanálisis buscará describir "el estatus y funcionamiento del cine". Es el momento en que hay un auge en las investigaciones psicoanalíticas, se enfatiza el interés por la ideología y se pone en el tapete el término "sujeto social" y cómo éste se representa a sí mismo y representa su experiencia social.

Christian Metz, por su parte, observó la relación psicoanálisis-cine como un avance dentro del campo semiológico, pues "se pasa del interés por el enunciado al afán de la enunciación". El ensayo de Metz El significante imaginario (1974) refleja con exactitud el momento que describe Casetti, muy especialmente la efervescencia que produjo el recorrido por el itinerario psicoanalítico, el cual puso al descubierto algunos de los mecanismos que permiten ver al espectador como una instancia, un constructo que evidencia parte de la institución que reconocemos como cine.

(...) la institución cinematográfica está compuesta por dos "maquinarias", la industria del cine, y la "regulación social de la metapsicología espectatorial" (la maquinaria mental históricamente interiorizada por los espectadores "acostumbrados a ir al cine", esta máquina de la institución es la que nos prepara para consumir películas) (...) La institución tiene como función (sobre todo esta segunda máquina) que se entable una buena relación con el objeto cine, una relación de placer, "la institución apunta por entero al placer fílmico y sólo a él" (subrayado nuestro, Metz: 14).

El   significante imaginarioMetz deja claro el camino a recorrer con la incorporación del psicoanálisis al campo de las teorías cinematográficas. Por una parte, se establece una relación en el modo en que funciona la psique humana (como fenómeno general) y la representación cinematográfica (como sistema particular). Al tiempo que se parte de la teoría freudiana de la subjetividad humana y la producción inconsciente para esclarecer los mecanismos presentes en la producción del texto fílmico. En este sentido, Robert Stam (1999) explica que "uno de los objetivos de la teoría psicoanalítica del cine es una comparación sistemática del cine como un tipo específico de espectáculo y la estructura del individuo social y psicológicamente constituido" (Stam: 147).

Es así como se observa que el cine implica procesos del inconsciente como cualquier otro medio artístico. De manera que la teoría cinematográfica se apoyará en las herramientas del psicoanálisis para demostrar cómo las películas en sí mismas sólo llegan a existir a través del trabajo ficcional de sus espectadores. Situación que aclara muy bien Stam, al decir que: "Obviamente, esto no significa que la propia película (en un sentido material) no preexista a su visionado, sino que sus significantes (su modo de producir significado) son activados al ser vista" (subrayado nuestro, Stam: 164).

Podemos decir que las imágenes y sonidos del cine no son significativos en sí mismos, pues necesitan del trabajo (inconsciente) del espectador para producir sentido, pues la película viene a representar una construcción del espectador.

En palabras de Metz, "el saber del sujeto cobra una forma muy concreta sin la cual no habría película posible". Pero, ¿cómo es ese "saber" al que se refiere Metz? Para el padre de la semiología del cine, se trata de un saber doble que constituye una unidad. Así Metz describe el visionado de una película como un proceso (u operación) que se basa en la competencia de un "saber doble", veamos:

Este saber es doble (...): sé que estoy percibiendo un imaginario (...) y sé que soy yo quien lo percibe (...) Este segundo saber se desdobla a su vez: sé que estoy percibiendo realmente, que mis organos sensoriales reaccionan físicamente afectados (...) y sé asimismo que soy yo el que percibe todo eso, que ese material percibido-imaginario acaba depositándose en mi interior como en una segunda pantalla, que es a mí donde acude para iniciar su cortejo y componerse como continuidad (...) (Metz: 49-50). 

La conclusión a la que llega Metz forma parte del fundamento de la teoría psicoanalítica del cine, en el cual la instancia del espectador es el lugar donde ese imaginario que es percibido (la película) accede a lo simbólico instaurándose como el significante de un cierto tipo de actividad social institucionalizada, llamada "cine".

1 Disciplina académica dedicada al estudio del cine a partir del uso de distintas disciplinas, entre ellas el psicoanálisis y la sociología. La filmología nace en Francia en 1947 y su autor más representativo fue Gilbert Cóhen-Seat.

Bibliografía:

Francesco Casetti: Teorías del cine. Cátedra. Madrid, 1990.

Robert Stam, Robert Burgoyne, Sandy Flitterman-Lewis: Nuevos conceptos de la teoría del cine. Estruturalismo, semiótica, narratología, intertextualidad. Paidós. Barcelona, 1999.

Christian Metz: El significante imaginario. Psicoanálisis y Cine. Gustavo Gili. Barcelona, 1979.